Nuestro compañero el Duende me ha dado permiso para poner este manual del que nos aprovecharemos para que nuestras esperas se hagan aun mas agradables. Gracias Amigo.
Como últimamente vengo observando una mayor preocupación por el tema del frió,(será que
se aproxima el invierno) me he tomado la libertad de documentarme, buscar entre algún artículo que tenía y parir este manual, el cual espero, que os pueda ser de utilidad para combatir el “biruje” de estas noches del puro invierno, mientras que anhelamos la presencia de ese fugitivo espectro que a todos nosotros nos atraen .
Pues bien...
Teniendo en cuenta la capacidad del cuerpo, para regular su temperatura incluso cuando la temperatura circundante es muy diferente y que como mamíferos que somos, tenemos la capacidad para generar nuestra propia temperatura, lo importante de este manual lo basaremos en como mantenerla ayudándonos de distintos tipos de fibras que a continuación detallare.
La temperatura normal del cuerpo de una persona varía dependiendo de su sexo, su actividad reciente, el consumo de alimentos, líquidos y la hora del día en la que nos encontremos.
Tradicionalmente la Medicina considera que la temperatura corporal normal tomada oralmente, oscila entre 36,5 y 37,5 °C en un adulto saludable ( el valor promedio viene a ser 37°C) . Aunque existen estudios recientes, que sugieren que la temperatura de promedio en adultos saludables es de 36,7 °C.
Pero esto para nosotros, no deja de ser una mera información y un poco mas de “paja” que os pongo para que el articulo parezca “currao”.
Bien.!!
Cuando nos encontramos en un entorno donde el exterior está más frío que nuestro cuerpo, la conductividad de nuestra piel provoca que perdamos calor a través de ella. Por ello, cuando esta temperatura corporal baja de 35ºC , empezamos ha tener la sensación de frió y a posteriori nos provocará temblores. Si dicha situación se prolonga y la temperatura sigue bajando, podemos entrar en un estado de hipotermia y de este mismo modo, pueden aparecer ciertos trastornos corporales que pueden producirnos incluso la muerte.
El ser humano en actividad siempre está perdiendo calor, ya sea por procesos ambientales o biológicos y los cuales pueden ser externos o internos. También somos de igual manera, una fuente de generación de calor, siendo este transferido y repartido a los distintos órganos y sistemas.
A continuación y en el desarrollo de este mismo artículo, procuraremos ampliar el conocimiento de las distintas formas de perdida de calor que se genera en nuestro cuerpo (La radiación, la conducción, la convección y la evaporación), con el fin de que su conocimiento nos ayude a conseguir su mayor aprovechamiento, veremos los mecanismos externos que nos generan esta perdida de calor y con los materiales que podemos combatirlos, siendo estos las modernas prendas fabricadas hoy en día.
LA RADIACCION.
La radiación es la propagación de energía a través del espacio vacío sin requerir presencia de materia
Como todo cuerpo con temperatura mayor que 0º calóricos, irradia calor al ambiente por medio de ondas electromagnéticas, existe una diferencia de temperatura entre nuestro cuerpo y el exterior. Cuando nos exponemos al medio ambiente, la piel actúa como un radiador de energía calórica, siendo los factores determinantes, la superficie del área descubierta y la situación de altura, vertiente o orientación que nos encontremos, es decir el “gradiente térmico”. En este proceso es en que más perdida de calor tenemos; El 68%.
En la cabeza, a través del cuero cabelludo no se produce vasoconstricción por el frío, por lo cual la cabeza, es un excelente radiador de calor, eliminando por ella, del 35% al 50% de la producción total de calor de nuestro cuerpo.
Por ello nada mejor que protegérnosla con un simple gorro o en su caso un pasamontañas, el cual nos ayudara también aumentar la temperatura, por medio de la retención de calor que genera la evacuación de dióxido de carbono de nuestro cuerpo, generado por la propia respiración. Con esta simple prenda disminuiremos en más de un 35% la perdida de calor de la cabeza.
Cuidado con los gorros hechos con material de polar denso, Gore-tex o similares con membranas. Esos son ideales para la lluvia, nieve y para cuando hace mucho frío, pero si no es demasiado y sudamos, estos materiales condensarán el sudor y nos empaparán el pelo.... Entonces perderemos gran cantidad de calor debido a la evaporación.
CONDUCCIÓN.
Es el flujo de calor por “gradiente térmico”. El fundamento físico es la transferencia de energía calorífica entre moléculas
La conducción, es la transferencia de calor por contacto de nuestra piel con el aire, la ropa, el agua, u otros objetos o superficies (el arma o la silla, por ejemplo). Este proceso de transferencia se produce debido a la interacción entre las moléculas que conforman los cuerpos, así aquellas moléculas que están a mayor temperatura, vibran con mayor rapidez chocando con aquellas menos energéticas (con temperaturas más bajas) transfiriendo estas ultimas parte de su energía. Si la temperatura del medio circundante es inferior a la del cuerpo, la transferencia se realiza del cuerpo al ambiente (pérdida), si no, la transferencia se invierte (ganancia). En este proceso se pierde el 3% del calor, si el medio circundante es aire a temperatura normal. .
Los factores condicionantes, son la diferencia de temperatura entre nuestra piel y la superficie de contacto (lo que se conoce como gradiente térmico), así como el área de piel expuesta al intercambio. En el agua, la conducción es 25 veces más rápida que en el aire porque tiene mayor densidad. La tierra y el hielo son también buenos conductores.
Así, si nuestra ropa está enfriada por la temperatura exterior y ésta entra en contacto con nuestra piel, nuestro calor corporal se irá pasando a la prenda con el consiguiente enfriamiento de nuestro cuerpo.
Lo Ideal, para evitar la conducción, seria tener una capa de aire entre las prendas y nosotros, pero dado que esto no es posible, adoptaremos el sistema de "capas" para vestirnos, es decir, llevar múltiples prendas para que entre ellas se formen capas de aire que nos van a aislar del exterior.
Por ejemplo:
Aísla más, una combinación de camiseta + camisa fina+jersey fino, que una combinación de sólo camisa gruesa y jersey grueso.
El sistema de “capas”, también nos permite ajustarnos a la temperatura más cómoda que consideremos, con el sencillo método de ponernos o quitarnos “capas” según nos vayamos acalorando con el ejercicio (recechos y caza menuda) o enfriando con la temperatura exterior (puestos de batidas o esperas).
Otra opción es la de utilizar tejidos que por su estructura generan cámaras de aire entre sus fibras.
Por ejemplo:
Los esquimales, utilizan tradicionalmente las pieles con el pelo por dentro, porque crean unas cámaras de aire que los aísla mejor de la capa de cuero que está en contacto con el exterior.
En los materiales modernos encontraremos artículos con el interior tipo "pelo", sobre todo, los llamados “polares”. Estos están hechos de infinidad de productos, poliamidas, poliéster, etc... Lo importante es su grosor y su densidad. Que no sean demasiado densos (permiten transpirabilidad) y que sean gruesos (grandes cámaras de aire entre las fibras)
A nivel de fibras, el producto que hoy por hoy es capaz de dar la máxima protección térmica con el mínimo de peso es el Thermolite. Una fibra de poliéster donde cada filamento está hueco, por lo que cada filamento del hilo es un aislante al igual que el pelo de muchos animales. “Peso por peso”, no hay material más ligero que proteja más del frío. Esta fibra se creó a raíz de descubrir que el pelo de los osos polares, entre otros muchos animales, es hueco y la reconoceréis en las tiendas, porque la etiqueta tiene un logotipo con un termómetro rojo o azul y con la palabra "Thermolite".
CONVENCION
Este proceso que ocurre en todo fluido, hace que el aire caliente ascienda y sea reemplazado por aire más frío. Así se pierde el 12% del calor. La ropa es la encargada de disminuir esa pérdida. Si existe una corriente de aire (viento), se produce una convección forzada y la transferencia es mayor, si no hay aire más fresco para hacer el reemplazo, el proceso se detiene. Esto sucede, por ejemplo, en una habitación pequeña con muchas persona, la tasa de pérdida de calor depende de la densidad del elemento en movimiento y de su velocidad (en el agua, debido a su densidad, la perdida de calor por convección será mayor) así como de la diferencia de temperatura entre el cuerpo y el ambiente exterior. El viento frío es un ejemplo clásico de pérdida de calor por convección, al duplicarse la velocidad del aire se eleva 4 veces la pérdida de calor.
Las prendas que utilicemos deben ir ligeramente holgadas (para crear cámaras de aire) pero no demasiado, para evitar que el aire circule libremente entre las capas y las enfríe por convección. Trataremos en lo posible de evitar que el aire circule libremente hacia el exterior, llevando prendas que se cierren en los puños con elástico o similar.
Un lugar donde se produce un enorme intercambio de temperatura es el cuello de las camisas si lo llevamos abierto (por ahí se escapa el aire caliente que hemos calentado con nuestro cuerpo). El uso de un "buff", pañuelo o bufanda, normalmente es la diferencia entre el confort y pasar frío, sin que tengamos que dejarnos una riñonada renovando el vestuario con prendas técnicas.
Llevar una prenda demasiado transpirable y que deje pasar el viento, nos conllevará una perdida importante de temperatura corporal (es importante que la prenda detenga el viento). Existen en el mercado una serie de productos conocidos genéricamente como “Soft Shell” (Caparazón blando) que están hechos mediante una membrana a prueba de viento.
Una membrana, es una lámina finísima de un material tipo plástico que lleva micro poros o agujeros del tamaño de un capilar. Estas membranas se laminan entre dos capas del tejido y detienen el viento, el agua y teóricamente permiten la transpiración. La teoría es que una molécula de vapor es capaz de pasar por los poros, mientras que una de líquido es demasiado grande para ello. Sin embargo, no existe la membrana que sea capaz de evacuar la cantidad de vapor que se produce en una situación de ejercicio intenso, con lo que en cuanto aumenta la humedad ambiental, el vapor se condensa de nuevo en el interior de la prenda en forma de líquido y te vuelves a notar mojado en el interior. Por lo que llevar una prenda con membrana mientras que realizamos un ejercicio intenso, es el equivalente a enfundarnos aquel antiguo chubasquero tipo "canguro", que ya comenzaba a calar un poco por todos lados por haberse vuelto poroso. Son muy recomendables este tipo de prendas, cuando hay viento intenso o mucho frío, pero para temperaturas moderadamente frías puede resultar excesivo.
El sistema de membranas más conocido es Gore-tex. Fue el primero que incluía un proceso de costuras termo soldadas para garantizar la estanqueidad de la prenda, sin embargo, el sistema Gore-tex hoy en día ha sido perfectamente imitado por otros fabricantes, que venden sus productos con idénticas garantías y a un menor coste
La manera rápida y fácil de conocer en una tienda si una prenda o un polar llevan membrana en el interior, es llevárselo a la boca y soplar con todas nuestras fuerzas a través del tejido. Si no notamos nada en la mano al otro lado del tejido, es que hay una membrana en medio.
La alternativa al sistema Gore-tex (o similar), son los “Soft Shell”, que en lugar de utilizar la membrana llevan capas de tejido muy denso capaz de parar el viento frío y ofrecernos un buen aislamiento térmico, pero permiten una mayor transpiración. Si hacemos la prueba de soplar a través de la prenda, si no hay membrana, deberíamos poder apreciar en nuestra mano, al otro lado del tejido, ligeras trazas del soplo y de la calidez de nuestro aliento.
A mi particularmente no me gustan, pues aun que hacen menos ruido y quizás nuestros “indios” la saquen mas provecho, existe una perdida de calor importante en los días de viento constante.
Otro caso de convección que nos hace perder mucha temperatura corporal, es cuando la prenda se moja con nuestro sudor. (Ahí también entra en juego la conducción). A través del sudor se conduce frío del exterior hacia el interior y por ahí perdemos calor. Lo mejor es tener una prenda que permita que la capa de tejido en contacto con la piel elimine el máximo de sudor ( una camiseta de Coolmax como primera capa para aislar la sudoración estaría bien). Un truco que va muy bien para frío intenso y actividad física intensa, es llevar una camiseta de Coolmax y encima llevar una de lana o algodón. Debido a que estos son capaces de absorber parte de su peso en líquido, absorberá cualquier humedad que se produzca en la prenda de Coolmax, que es la que estará en contacto con nuestra piel. Las características del Coolmax en contacto con una prenda de algodón, genera un fenómeno conocido en el textil deportivo como "capilaridad" que hará que la transpiración circule por la fibra de Coolmax hacia el algodón del exterior a toda prisa, con lo que la capa de Coolmax en contacto con nuestra piel estará permanentemente seca. Esta misma capacidad de absorción la tiene la “Lana virgen” y además nos mantiene mas calientes
EVAPORACIÓN.
Mediante la evaporación del sudor se pierde el 27% del calor corporal, debido a que el agua tiene un elevado calor específico y para evaporarse necesita absorber calor, lo toma del cuerpo haciendo que este se enfríe. Una corriente de aire, que reemplace el aire húmedo por el aire seco, aumenta la evaporación.
Para que se evapore un gramo de sudor de la superficie de la piel, se requieren aproximadamente 0,58 kilocalorías, las cuales se obtienen del tejido cutáneo, con lo que la piel se enfría y consecuentemente el organismo.
La evaporación de agua en el organismo se produce por los siguientes mecanismos:
Evaporación insensible o perspiración: se realiza en todo momento y a través de los poros de la piel, siempre que la humedad del aire sea inferior al 100%. También se pierde agua a través de las vías respiratorias.
Evaporación superficial: formación del sudor por parte de las glándulas sudoríparas, que están distribuidas por todo el cuerpo, especialmente en la frente, palmas de manos, pies, axilas y pubis.
En situaciones normales de temperatura, se pierde por la piel 2/3 del calor por perspiración y 1/3 por la respiración.
Es importante que la selección de prendas que utilicemos en casos de movilidad física, no nos abrigue demasiado, porque entonces sudaremos y perderemos calor
Os suena la frase…. "voy a entrar que se me está enfriando el sudor"
Exacto!
Lo que ocurre es que el sudor se evapora y nos enfría en es proceso.
En el caso de los recechos o aguardos, donde la ubicación nos exija de un esfuerzo físico en el traslado, es importante utilizar una selección de prendas, de forma que al comenzar el recorrido tengamos un poco de fresco, para que luego, vayamos entrando en calor, pero hay que tener cuidado de no ponernos una selección de "híper transpirables", porque todo lo que vayamos a transpirar a través de las prendas será a base de evaporación y a costa de calor corporal. Prioritariamente llevaremos prendas basándonos en el sistema de capas, que nos permita controlar lo que se conoce como “termorregulación”, es decir, cuando nos encontramos sin frío ni calor en una actividad física mantenida.
Llegados a este punto, he de suponer que empezamos ha entender que nos produce el frió, o en su defecto, cuales son los mecanismos que influyen para perder el calor que nuestro propio cuerpo produce. Así que ahora no me gustaría pasar por alto en este manual, el hecho de que podáis conocer el comportamiento de algunas de las prendas que nos ayudaran a ganar esta guerra contra el frió y a mi criterio, el tipo de prendas que utilizaría en las distintas capas.