Lobo Marley ha vuelto a dar la nota y ha protagonizado un nuevo desmantelamiento de refugios de caza del lobo en la provincia de Zamora y ha denunciado ante la Guardia Civil dos cebaderos preparados por los cazadores para abatir a los cánidos.
Además, también ha denunciado un posible maltrato animal por considerar que los animales utilizados para atraer al lobo, en el caso de burros, presentaban "el cráneo partido" y han podido ser matados de forma cruel, informan en La Opinión de Zamora. De esta forma el presidente de la organización ecologista Lobo Marley, Luis Miguel Domínguez, actuó, junto a otros integrantes del grupo, en las proximidades de Mombuey y en las proximidades del embalse de Cernadilla, en suelo de San Salvador de Palazuelo porque, según ellos, dos lobos "iban a ser matados de manera inminente, uno en cada puesto, y lo iban a llevar a cabo en estos días porque la caza del lobo finaliza a finales de febrero y había que actuar". Precisa que en el cebadero de las proximidades de Mombuey "habían colocado recientemente una cierva, en tanto que en San Salvador de Palazuelo un macho de ciervo".
Desde Lobo Marley acusan a la gestora de la zona de utilizar burros para cebar los puestos y los casos han sido denunciados ante la Guardia Civil porque Lobo Marley considera que se cometen varios delitos, uno contra la Ley de Caza de Castilla y León, "que prohibe el uso de atrayentes para que el predador entre y se ponga a tiro, y otro por maltrato de animales, al entender que los burros son sacrificados presumiblemente de una manera inhumana y en contra de la ley más básica".
El delegado provincial de Caza, de Zamora, José Antonio Prada, manifiesta que la ceba para facilitar la caza del lobo, al norte del Duero, donde es especie cinegética, "no está prohibida por la Ley, que hace referencia al uso de sustancias atrayentes".
El responsable de Medio Ambiente de la organización agraria, Coag, José Manuel Soto, hace hincapié en que "la caza del lobo es legal y, dentro de los plazos establecidos, los cazadores tienen derecho a cazarlo". Añade que con estos comportamientos Domínguez "puede conseguir que el sector ganadero, que es el perjudicado, en vez de ser tolerante aparezca el odio y lo pague el animal". Reitera que la Consejería de Fomento y Medio Ambiente "debe cumplir con el cupo autorizado".
Esta actuación de Lobo Marley se suma a la realizada el día de los Santos Inocentes cuando procedió a destruir tres casetas instaladas en la Reserva de Caza de La Culebra y en un coto próximo, acciones por las que fue denunciado por parte de la Oficina Nacional de la Caza (ONC).