Yo también he vivido algo parecido. Gorrinas con un control de la piara, de rayones, bermejos etc. como nunca había visto por aquí. La primera vez en Navidad, la siguiente el 1 de abril y este fin de semana la tercera. En mi zona hasta ahora, si los oías acercarse ya sabías que iban a cumplir. Pero ahora ya no, se acercan, y esperan, controlan a los peques a base de golpes, gruñidos... pero dar la cara nada de nada.
En Navidad estuvieron parados cerca del cebadero media hora. Pernsaba que era uno porque apenas los sentí. De repente 2 se pasaron por delante del cebadero. Luego oí las piedras. Encendí y eran varios de la primavera anterior, las hembras en segundo plano escondidas y arrearon en décimas de segundo. No volvieron más por el cebadero.
Los de abril, en otro cebadero, estuvieron una hora dando vueltas hasta que me sacaron y tampoco volvieron más.
Este sábado más de lo mismo en otro cebadero y tras más de una hora dando vueltas, no entraron. Llegue a ver a dos gorrinas asomar la jeta al lado del cebadero. Pero había más que esperaban en el monte. No me percaté de que me sintieran pero era una noche muy pesada, sin viento, es posible que oyeran a la perra que respiraba fuerte por el calor, estábamos a 35m.
Lo especial es que hasta ahora nunca me había pasado esto con piaras en esta zona y las tres veces me he ido con la misma impresión, que estaban muy desconfiados, pero lo que más me llama la atención es el control total sobre el resto del grupo y como una o dos gorrinas hacen de exploradoras.