Buenos días y bienvenida al foro, en primer lugar no se si habrás pasado por el apartado presentaciones, pero eso ya lo comprobará el moderador.
Respecto a lo que preguntas es muy genérico, no todo el mundo ha empezado sus andanzas cinegéticas desde pequeño y aprendiendo de sus familiares directos. Conozco a varios amigos que se aficionaron a sus 30 años o incluso más, sin tener a nadie en la familia que cazase. Siempre hay algún cazador, conocido de tus amigos o familiares, de plena confianza con los que puedes iniciarte y pueden enseñarte tan bien o mejor que un familiar, aunque ver la caza desde niño te va dando muchas experiencias aprendidas.
Respecto a servicios educativos para inicarte en el mundo de la caza, no se si habrá alguno en tu zona, en la mía no y además ahora casi cualquier actividad subvencionada y relacionada con la caza, está más relacionada a destruir y prohibir esta actividad que a formar cazadores, no obstante informate en los servicios de medio ambiente de tu país o comunidad, no has dicho de donde eres para facilitar la información, aunque por tu nick, entiendo que eres de Paraguay.
Respecto a los clubes de caza, tengo amigos a los que les ha ido mal en esos clubes, ya que al fin y al cabo no suelen realizar actividades de formación y a otros no les ha ido mal, porque tenían buenos amigos dentro del club que les han ayudado mucho.
No se si te he ayudado en algo, pero no desistas de tu deseo de empezar en este mundo. Aquí también recibirás mucha ayuda y buenos consejos. Te voy a dar el mio, cazamos porque lo llevamos en los genes, pero siempre desde la ética moral y el total respeto por el entorno y los animales. Cazar no es matar a un animal, eso solo es la culminación de toda la acción, la caza verdadera es todo aquello que te lleva hasta el momento de decidir si abates al animal o lo dejas marchar porque no es lo que buscas o porque hay riesgo de dejar malherido al animal. No buscamos ni nuestra exclusiva diversión ni mucho menos el sufrimiento del animal, solo damos rienda suelta a un instinto primitivo que va en nuestro ADN y que nos lleva a aprovecharnos de la carne de los animales de nuestro entorno y siempre de forma legal.
Perdona por el ladrillo que te he soltado.
Un saludo.