Un pastor que llamó a un amigo suyo de la capital para pedirle un pequeño favor:
Le pidió que se quedara el un rebaño de ovejas paridas , las llevara a pastar y cuando se hiciera de noche las encerrara en el corral que le darian poco trabajo.
al dia siguiente le pregunto al amigo
- ¿que tal encerraste las ovejas? bien se encerrarron solas menos una pequeña que cada vez que me a rimaba a ella echava las orejas para atras y no veas como corria asta que la pude meter dentro
