Las huellas en las bañas son siempre engañosas. Yo prefiero coger rastros fuera, en cualquier vereda, donde el cochino va en movimiento, incluso con su trote cochinero.
En la baña son siempre huellas de bicho parado. Con el piso tan blando y el animal parado con todo su peso, se le abre la pezuña y se ensancha mucho la huella. Eso se aprecia en la foto.
Con la mínima pendiente que haya se alarga también demasiado. Eso también se a precia.
Los cascabillos se les marcan mucho, más en las patas de atrás, y eso también acaba siendo engañoso. En la foto también se ven mucho. No sabemos de qué pata es esa huella. Los que marcan cascabillos como esos en sus patas delanteras, suelen ser buenos.
No tiene que pesar tanto para ser un buen verraco.
Los rastros de ese mismo animal, en sus pasos por cualquier vereda, serían muy distintos.
En cualquier caso ese cochino parece macho y tiene ya un buen guiso.