Al final, su caza, se trata de salir al campo con tranquilidad, respirar el aire limpio , sin ruidos, sin estrés, cargarse de aromas naturales, olvidarse de los problemas y la ciudad, leer las huellas , rastros, interpretar los aires , señales, escodaderos... Observar la naturaleza con los espectaculos que nos regala dia a dia, esos amaneceres y atardeceres...y disfrutar de la jornada . Lo menos importante es el abate. Ya hace ya muchos años que disfruto mucho mas observándolos , haciéndoles fotografías , estudiar sus diferentes comportamientos , acercándose y Volviéndome a alejar sin que se hayan percatado de mi presencia...viendo a las hembras amamantando a los corzinos, o cuando juegan entre ellos chospando y brincando como los cabritillos.....su dulzura cuando comen eligiendo las yemas y brotes mas tiernos...en fin, tantos y tantos momentos que nos regalan si los sabemos recoger. Y todo eso lo cambian los marrulleros....por prisas, envidias , egoísmos , cantidad, carrileos sin pisar campo, fareos
s nocturnos, trapicheos, tiroteos indiscriminados en su casa y si pueden en casa del vecino mejor, y siempre, siempre exhibicionismo público.... Puro hedonismo. ... Alguien se quiere cambiar por ellos..??