El error de un compañero del foro hace poco, cometiendo una errata en una palabra escrita por él me ha hecho recordar una anécdota de hace años... Montería de invitación con todos los asistentes al evento nerviosos pues las recovas no acababan de llegar. Sobre todo la Señora de la casa, que parecía un rabo de lagartija preguntando una y otra vez si ya venían los perros. Y por fin llegaron y al primero que se acercó a ella para saludarla, sin dejarle hablar le dijo... ''Hombre, fulano, ya sabía yo que no me follabas''... La mueca de sorpresa de ''fulano'' fue de antología y la carcajada de los que oyeron la frase aún resuena en el cortijo. La Señora, percatada del fallo rectificó al momento... ''Perdona, hombre, quise decir que no me fallabas''. ''No se preocupe, doña Beltrana, me hago cargo''... Y estrechándole la mano, marchó a por las migas... jjjjjjj. No van los muñequinos... Anécdota verídica, doy fe. jjjjjj