Hola a todos.
Después de unas semanas difrutando del foro como lector, me decido a presentarme ante vosotros. Vaya por delante que me ha sorprendido encontrar un foro relacionado con los aguardos, y más aún con la calidad, cantidad y diversidad de temas tratados. Sirvan éstas líneas para expresar mi mas sincera enhorabuena tanto a los administradores, como a los usuarios, sin los cuales un foro no prospera abocándose a la desaparición. Un reconocimiento especial he de tener para con aquellos que, siendo numerosos en éste foro, nos deleitan con su saber hacer a la hora de escribir. Es un verdadero placer poderos leer.
Después del merecido "peloteo", os cuento mi experiencia. Me llamo Pablo, vivo en Madrid. A pesar de ello tengo la fortuna de poder disfrutar del campo la mayor parte de los periodos vacacionales, incluidos los fines de semana.
Como otros muchos niños empezé tirando, con la escopeta de aire comrimido, a toda suerte de blancos que mi imaginación me decía posibles. A los 11 o 12 años me pase al arco. Por aquel entonces no existían los de poleas, siendo un arco Yamaha de 35 libras, lo más que mi infancia alcanzaba a tensar.
Nunca me consideré cazador, si bien es cierto que con esas pequeñas armas, así como con un fusil de pesca submarina, pude experimentar en no pocas ocasiones la emoción de cazar. Incluso buceando, acechando un pez y disparándole un arpón, podías sentir ese instinto primitivo que todos debemos llevar en algún rincón de nuestro ADN. Poca experiencia como cazador, y toda aprendida de forma autodidacta.
Desde los 17 años disfruté de la naturaleza de otras formas muy diversas, que nada tenían que ver con las armas ni la caza.
Por circunstancias de la vida al llegar a los cuarenta, empezé a cazar de verdad, de la mano de mi mujer. Nunca podré olvidar la emoción que sentí en el primer rececho a un venado... Desde entonces le acompaño con frecuencia a Monterías, principalmente de venado y jabalí. Me gusta cazar al rececho el primero, y de tres años hacia aquí, al aguado el segundo.
Además me gusta despiezar los animales que cazo, así como conservar, procesar y cocinar las carnes que la actividad cinegética nos brinda. No creo que haya otra carne tan sana, y a buen seguro que ninguna otra nos deja el "sabor añadido" que te traslada, sonrientemente, desde la mesa al momento en que cazaste la pieza...
Cazo con un 30.06. Estoy contento con el aunque no tengo criterio para comparar con otras armas.
Me propongo participar en el foro más como aprendiz que otra cosa, y aprender de vosotros todo lo que sea posible.
Perdonar por lo extenso de la presentación.
Saludos y buena caza.