La sangre tenia color rojo intenso, marcando al principio gotitas a los 4-5 m del disparo, después aumentaba con más cantidad de gotas y alguna mancha un poco más grande, grasa no había. Entró en la acequia de barro que se ve en la foto dejando allí la última mancha importante, a la salida de la acequia ya no había más que alguna pequeña gota que tenía que buscar casi con lupa y por dentro del zarzal, que debería haber manchado en abundancia, ya sea por pararse al sentirse seguro o al rozar con las zarzas, apenas pude encontrar 4 o 5 gotas en 15m.
Al final, me vi obligado a abandonar por tres motivos, el primero porque perdí el rastro de sangre, el segundo porque ya no sabia si la sangre era del jabalí o mia
. y en tercer lugar y viendo que la sangre desaparecía en lugar de ir a más, tampoco me quería meter dentro del encame ya que allí dentro hay como mínimo 3 o 4 jabalies más y andando a gatas por sus túneles sin poder moverme ni levantarme...