Si que son duros, hace 3 temporadas invité a un amigo de Huelva a que se viniera un fin de semana a nuestro coto, fuimos a dar un gancho con los amigos al jabalí. No llevábamos ni 10 minutos cuando los perros empiezan a latir en una gran zarza, todos esperando que saliera algo, no salía nada y en cuanto llegó algún perro más se produjo un agarre, al ser mi amigo novato en estos menesteres le pregunté si quería entrar el al agarre, a lo que contestó afirmativo pero un poco titubeante, me acerqué con el y antes de darle la herramienta me cercioré de que no fuera ningún animal grande que pudiera ponerlo en dificultades, al ver que era una cochina mediana y que los perros la tenían bien cogida le pasé el cuchillo, y no sin esfuerzo se metió en la tupida zarza y dió muerte al animal de una certera puñalada en el sobaquillo. Hasta ahí bien, cuando salio de la zarza lo felicitamos y dejamos que los perros mordieran un rato, ya que estábamos a primeros de temporada y había perretes nuevos, le dijimos de sacar al animal para aviarla, y sacarle unas fotos con su primer cochino, cual fue nuestra sorpresa, que a la cochina, en los huesos por cierto, le faltaba una pata entera, un jamón, como si se lo hubiera cortado un carnicero dejándole el hueco perfecto, eso sí, cicatrizado y cubierta de pelo la zona en su mayoría. Nos quedamos perplejos, llegamos a la conclusión de que podía ser un disparo de escopeta con perdigones y que la pata se hubiera infectado y poco a poco secado, desprendiéndose de ella, algo muy raro la verdad.
Le sacamos algunas fotos a nuestro amigo con su cochina "dificurtosa" y la dejamos allí para deleite de las alimañas, pues nadie se atrevió a degustar semejante animal tan feo. Le preguntaré al amigo si aún conserva las fotos de tan anecdótico noviazgo.