Me alegro que te guste, ya te digo que no soy un experto y lo mismo hay algo mejor o algo que no debe hacerse…
…pero ya llevo tiempo con ello.
Las panzadas de grasa de caballo, preparaba lo mío y lo de mi padre: botas, macutos, cananas, fundas de cuchillos, bolsas de cartuchos, fundas de escopetas y rifles y yo que sé que más…., me las daba en Septiembre, con el veranillo de San Miguel que ayudaba a empapar la piel, como bien dices. A mayor previsión de lluvias, más grasa para el cuero…
Hasta que se me ocurrió de joven calentarla un poco al baño maría y a base de pincel los dedos de la mano te agradecían aquellas sesiones maratonianas… mientras mi setter se tumbaba a mis pies, a verme, sabedor que se aproximaba el momento…
Para la bota de vino era otra historia, lo hacía al terminar la temporada, ese día desayunaba un par de plátanos, soplaba la bota y a frotar… luego le reponía en vinagre de manzana para conservarla, hasta que un par de días antes de la apertura volvía a comerme el par de plátanos, la aclaraba y ya le hacía la primera carga de vino de pitarra, que rellenábamos hasta el final de temporada.
Y todo eso, también es cazar…