Os voy a contar como silenciar vuestra silla de esperas.
Yo utilizo las de Decatlhon,pues de las muchas que he probado,me parecen las mas comodas,tanto para sentarse en ellas,como para su trasnporte.
Necesitaremos:
-Una pequeña manta de tejido polar silencioso,que podemos adquirir fácilmente en algún bazar chino o similar.
-Un bote de pegamento en aerosol,que encontraremos en tiendas y almacenes de bricolaje.
-Por supuesto,la silla.Yo siempre he preferido la que no tiene apoyabrazos,para evitar ruidos de golpes o roces y que además para cazar con el arco,es condición imprescindible.Las podeis encontrar en dos diferentes alturas,para diferentes tipos de puesto.
Con este material a mano,desmontamos la silla,dejando por un lado su esqueleto metalico y por otro,el tejido sobre el cual nos sentamos y que vamos a silenciar.
Este tejido lo extendemos sobre una superficie plana,de forma que quede con el menor numero de plieges posible,al igual que la manta polar.
Sobre la cara en la que nos sentamos,le aplicamos una buena capa de pegamento o cola en aerosol,que previamente habremos agitado.
Una vez aplicado el pegamento,ponemos el asiento sobre la manta polar,tratando de evitar que queden pliegues y aplicándole un poco de presión para que quede bien pegado.No hay que demorarse demasiado en este punto,pues este tipo de pegamento seca muy rápido.
También os recomiendo,no tener nada cerca del aerosol cuando se esta aplicando,porque se forma una nube que mancha todo lo que pilla con el pegamento.
Por ultimo,solo queda recortar el sobrante de la manta con unas tijeras,dejandole unos cuantos centímetros de mas,para doblar y pegar por la otra cara.
Si tenemos una maquina de coser,podemos darle un cosido por todo el perímetro del asiento para asegurarlo y evitar que pueda despegarse.
De este modo tan sencillo,evitaremos esos molestos ruidos que se producen al movernos sobre el asiento,sin tener que llevar una manta aparte o cualquier otra prenda para ello y le añadiremos un poquito de aislante para las frias noches invernales,que tampoco viene mal
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A darle al bricolaje
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