A la pregunta ¿cual es el mejor? pues la respuesta es clara: el que mejor se adapte a tí.
Este tema es algo muy personal, pues hay a quien le va bien tirando con punto rojo, a quien le va bien con láser incluso sin anclar, quien se maneja bien con peep y pin iluminado, y otros que incluso tiran sin peep, y simplemente anclando como toca y con pin iluminado.... y alguno más que me dejo en el tintero.
Yo probar, he probado con todos ellos, y sin duda, con el que soy más preciso es con peep y pin iluminado. Pero con algunos requisitos imprescindibles, como por ejemplo que el peep sea de gran tamaño, que el cabezal del visor también lo sea (mínimo 2 pulgadas interiores) y que solo se ilumine el primer pin, usar siempre el botón de boca y referenciar la nariz con la cuerda, y sobretodo y antetodo, tirar con los dos ojos abiertos. Al final todo va encaminado a poder captar la mayor luminosidad posible, y por tanto precisar mejor el disparo en el menor tiempo.
Tuve una época en la que no era capaz de agrupar porque no encontarba el equilibrio entre peep y visor sin luz y quité el peep al arco, y me fue de gran utilidad y confianza descubrir que simplemente anclando con firmeza y referenciando dicho anclaje, las flechas iban al sitio (a distancia de espera). Esto es evidente, pero comprobarlo por mi mismo me hizo darme cuenta que el peep, simplemente es una ayuda más para esa precisión final, pero que es el anclaje la madre del cordero.
Después todo ha sido cuestion de entrenar, entrenar y seguir entrenando a oscuras, para que cuando llegan los lances, las flechas vayan donde toca. Evidentemente no es lo mismo tirar a un primalón confiado tras varios minutos en el cebadero, sabiendo que aguantará la luz sin problema, que jugársela con un gorrino de porte con el que sabes que al menor destello le va a dar risa, pero saber elegir ese momento, también es parte de la caza con arco.
Otro detalle bien importante es que el peep esté en su lugar preciso en la cuerda. Está de moda que te manden los arcos ajustados desde tienda, y te pongan el peep donde ellos estiman que es su lugar correcto. Esos pocos milímetros de diferencia de estar perfectamente frente a tu ojo, a no estarlo son vitales. Porque de día, tu cerebro, insconscientemente te hace corregir y mueves la cabeza para corregir ese error ínfimo, y las flechas van al sitio, pero de noche eso no es posible precisarlo con igual certeza por la falta de luz, y los errores se hacen comunes a pesar de creer haber hecho todo igual que tirando de día.
Otra cuestión importante para mí, es que la linterna este junto al visor, de modo que en ese mayor haz de luz que emite, el pin quede centrado en ella, y así la vista va directa a la zona de impacto.
Y creo que eso es todo, luego lo de siempre, entrenar y templar los nervios con el bicho delante.
saludos