Quieren acabar con el arruí en Murcia
El arruí lleva más de cuarenta años en nuestro país, tiempo en el que ha demostrado su gran capacidad de adaptación a los ecosistemas más exigentes y en el que, así mismo, se ha convertido en una especie más de nuestra de caza mayor.
La Región de Murcia en general y la Reserva Regional de Caza de Sierra Espuña en particular son referencia obligada cuando de cazar arruís se trata, pues precisamente en esta reserva murciana, en 1973, se produjo la introducción del también denominado carnero de Atlas.
Sin embargo, la política con respecto a esta especie, que fue llevada también a otros puntos de la geografía española, ha cambiado diametralmente en los últimos tiempos, pasando de potenciar su gestión y desarrollo con fines cinegéticos a tratar de erradicarla en muchos enclaves del país. Y tanto ha cambiado la filosofía en relación a este ungulado, que hasta en su principal santuario, Murcia, se ha dado un giro copernicano, como bien se deduce en la información publicada en el periódico ‘La Verdad’, que reproducimos extractada a continuación:
“El nuevo rumbo de la política oficial sobre este ungulado exótico en la Región se oficializó el viernes [30 de mayo] en la sede de la Consejería de Agricultura y Agua, donde la directora general de Medio Ambiente dio a conocer a los actores sociales afectados (propietarios, cazadores, ecologistas, hosteleros, Universidad de Murcia y la organización agraria UPA, entre otros; COAG y Fapen no asistieron) las «medidas excepcionales» adoptadas por el Ejecutivo autónomo para reducir drásticamente sus poblaciones, y que incluyen el abatimiento de ejemplares en zonas libres. Tan diferente es el nuevo paradigma del Gobierno con respecto a esta polémica especie que incluso se plantea la posibilidad de erradicarla a largo plazo en Sierra Espuña, o sustituirla por la cabra montés.
¿El motivo? La expansión incontrolada de la especie fuera del entorno de Sierra Espuña (ocupa ya entre 60.000 y 70.000 hectáreas en todo el territorio de la Comunidad Autónoma, según datos oficiales), lo que se traduce en daños en cultivos y también en la flora protegida. Estos efectos negativos (y las consiguientes protestas de agricultores y propietarios de fincas) se han agravado especialmente durante los últimos meses por la prolongada sequía, que ha empujado a los animales a alimentarse en las plantaciones. Esta situación ha precipitado un cambio en el modelo de gestión que la Dirección General de Medio Ambiente ha decidido después de analizar pros y contras en una comisión de trabajo en la que han participado todos los sectores afectados.
Reserva de Caza deficitaria
Medio Ambiente admite además por primera vez que la Reserva Regional de Caza es deficitaria para la Administración y que apenas aporta beneficios en el entorno: «Su contribución al desarrollo económico no se ha cuantificado y seguramente no es rentable», señala textualmente el informe presentado el viernes por la Dirección General. Un estudio realizado por un técnico de la casa, y presentado hace tres años durante una jornada profesional dedicada a promocionar el arruí como trofeo cinegético, cifró el impacto económico de la caza de este ungulado en Sierra Espuña en 530.000 euros anuales.
También por primera vez de forma oficial, se advierte sobre los daños del arruí en la vegetación protegida y el freno que supone para la expansión de la cabra montés, el ungulado autóctono, que ha comenzado a colonizar este espacio natural después de décadas ausente. Este cambio de criterio coincide con la reubicación de las competencias de Medio Ambiente en la Consejería de Agricultura y Agua y el nombramiento de una nueva directora general. […]
El planteamiento general de Medio Ambiente es reducir el número de ejemplares en Sierra Espuña a 300 (como se especifica en el Plan de Ordenación de Recursos Naturales del Parque Regional, una intención anunciada ya hace casi dos años pero no llevada a la práctica); fijar las poblaciones restantes en el interior de la reserva; controlar drásticamente a la especie en el resto de la Región (se distribuye en el centro, el oeste y algunos puntos del Noroeste de la Comunidad Autónoma, y se caza en 130 cotos desde hace 13 años); y definir en qué zonas de la Región debe quedar localizado el arruí y con cuántos efectivos, con un modelo de funcionamiento que responda a «las nuevas normativas surgidas en materia de gestión de espacios naturales, especies exóticas, conservación de hábitats y planificación cinegética».
La cifra oficial de arruís en Murcia, de acuerdo con el último censo, realizado el año pasado, es de unos 2.100 ejemplares (1.400 en Sierra Espuña y los otros 700 en el resto del territorio), aunque ningún experto independiente da por bueno este cálculo. Fuentes oficiosas señalan que el número real puede acercarse al doble […]”.
http://www.elcotodecaza.com/noticia/caza-mayor/quieren-acabar-arrui-murcia-140602