Se me traspapelaron las respuestas, disculpadme y muchas gracias por vuestros comentarios
Enhorabuena Fozy por tu relato, pues es entretenido, ameno y divertido. Me ha gustado porque además lo realizas con tu hijo, que buena escuela va a tener. Lo que me ha llemado la atención de la espera es que los guarros acudan después de segar. Pues mi larga experiencia me ha demostrado que los guarros extrañan el lugar al menos unos dias, una vez cosechado.
Es un sitio un poco especial y están acostumbrados a ruidos y olores... después de segar, como mucho, un día sin entrar y a partir de ahí en oleadas a por las mazorcas que deja la máquina... Ahora, que están los maizales como de metro y medio, ya están por allí todos los días. Cruzan el río y vienen al barro que se forma tras el riego, se les oye andar por dentro y pasarte "muy cerquita", te diviertes y los crios más.
Mayo estuvó más flojo, su fueron a otras siembras y entraban menos pero ya están las cosas en su sitio... Ahora con el arco del chaval estamos a otra historia y dos veces ya ha estado a punto de abrir desde que acabó la evau.., sospecho que no tardará mucho en soltar... El otro día faltó poquito poquito en donde los pinares... él con el arco abajo, a 15m y yo observando la jugada desde el puesto de rifle con los binoculares nocturnos.
Solemos divertirnos, aunque sea a 39 grados pasada la medianoche...